Servicio de mediación

LA IMPORTANCIA DE LA MEDIACIÓN Y LA FIGURA DEL MEDIADOR ESPECIALIZADO

La reciente Ley Orgánica 1/2025, de 2 de enero, refuerza el papel de la mediación y otros Medios Adecuados de Solución de Controversias (MASC) como un requisito previo en determinados procedimientos judiciales. La mediación se perfila como una herramienta esencial para la resolución extrajudicial de conflictos, promoviendo acuerdos equitativos y reduciendo la carga de los tribunales.

¿Qué es la mediación y cuándo puede aplicarse?

Centrándonos en la mediación, podemos decir que es un proceso estructurado en el que las partes de un conflicto, asistidas por un mediador imparcial, buscan alcanzar una solución de mutuo acuerdo. Su aplicación abarca el ámbito civil y mercantil, incluidos los conflictos transfronterizos, siempre que no versen sobre materias excluidas por ley, como el derecho penal, laboral o concursal.

La norma establece que, en ciertos litigios civiles, acudir a la mediación u otro MASC será un requisito de procedibilidad. Es decir, antes de presentar una demanda judicial, las partes deberán intentar resolver el conflicto a través de estos mecanismos.

Puedes obtener más información sobre las novedades que trae la norma en la siguiente entrada a nuestro blog:

La importancia de un mediador especializado

Contar con un mediador especializado es clave para garantizar la efectividad del proceso. Este profesional debe reunir cualificación específica y formación acreditada en la materia, ya que de su pericia depende la calidad del proceso y la viabilidad del acuerdo alcanzado.

Un mediador formado aporta:

Neutralidad e imparcialidad, asegurando que ninguna de las partes esté en desventaja.

Habilidades de comunicación y negociación, fundamentales para fomentar el diálogo y el entendimiento mutuo.

Conocimiento jurídico, que permite estructurar acuerdos dentro del marco legal vigente.

Para verificar si un mediador está debidamente acreditado, es recomendable consultar el Registro de Mediadores del Ministerio de Justicia, donde se inscriben aquellos profesionales que cumplen con los requisitos de formación y habilitación establecidos en la normativa.

Ventajas de recurrir a la mediación

Reducción de costes y tiempo en comparación con un procedimiento judicial.

Mayor control sobre el resultado, ya que las partes construyen su propio acuerdo sin imposiciones externas.

Fomento de la relación entre las partes, especialmente relevante en conflictos familiares o empresariales.

Carácter confidencial, lo que protege la privacidad de los implicados.

Efectos jurídicos de la mediación

Si la mediación culmina con un acuerdo, este puede elevarse a escritura pública, dotándolo de carácter ejecutivo, o solicitar su homologación judicial cuando proceda. En caso de que el proceso de mediación fracase, la parte interesada podrá acudir a la vía judicial, debiendo acreditar que ha intentado previamente la solución extrajudicial.

Consulta el Registro de Mediadores

Antes de elegir un mediador, es fundamental comprobar su capacitación y habilitación profesional. A través del Registro de Mediadores del Ministerio de Justicia, cualquier ciudadano puede acceder a la información sobre los profesionales inscritos y verificar su idoneidad para intervenir en un conflicto.

En RAIA, asesoramos sobre la viabilidad de la mediación en cada caso y contamos con mediadores acreditados, garantizando un proceso ágil, transparente y ajustado a derecho.

No dudes en consultarnos para recibir orientación personalizada en la gestión de conflictos mediante mediación.